Cómo son las relaciones de pareja en la nueva normalidad

Sin lugar a dudas, uno de los peores periodos de nuestra vida ha sido el confinamiento. Ha sido una etapa en la cual nadie lo ha pasado bien por las experiencias que hemos tenido que vivir. Y una de las grandes perjudicadas han sido las parejas, las cuales en muchas ocasiones se tuvieron que poner a prueba para adaptarse a las nuevas necesidades.

Las parejas no lo han tenido fácil durante el confinamiento. Tanto las que tuvieron que pasar la pandemia juntas, como las que la vivieron a distancia han tenido que superar pruebas duras que han demostrado que su relación era más fuerte de lo que pensaban. Mientras que las más débiles se quedaron por el camino.

Mejorar la pareja hacia la nueva normalidad

Una cosa está clara, la pandemia nos ha hecho vivir cosas que nunca habíamos soñado. Eso provocó que muchas personas sintieran rabia y enfado y descargan con las personas más cercanas, siendo la persona la pareja en muchas ocasiones. Esa rabia provocaba discusiones. Pero por suerte, esas mismas discusiones que rompieron parejas, también ayudaron a otras a ser más fuertes. A través de las mismas, las personas encontraron herramientas a través de las cuales aprender y buscar recursos para llegar a acuerdos y así poder estar más unidos.

Una cosa está clara, cuando nos enfadamos, no solo estamos mostrando a la otra persona lo peor de nosotros mismos, también vemos a la otra persona como alguien irritante. Eso pone en riesgo la relación, por lo que es importante llegar a un acuerdo lo antes posible para evitar una ruptura total.

La importancia de la gestión de los enfados

Es importante no descargar el enfado con la pareja. Y, además, es vital reconocer que la pareja tiene fallos, pero que no estamos con ella por dichos fallos. Sino que realmente estamos por las cualidades que nos enamoraron desde el primer día.

Cuando estamos pasando una fase de enfado, no tenemos que ver lo malo de la otra persona, sino que debemos recordar sus puntos fuertes. Y para conseguirlo, es importante aprender a ser flexibles y no descargar todo lo malo hacia la persona que realmente queremos. Es una manera de hacernos más fuertes y conseguir que la pareja tenga unos cimientos más duraderos.

Aprovechar a estrechar los vínculos

Una cosa se ha demostrado durante la pandemia, la comunicación es vital. Eso lo saben muy bien las parejas y eso hace que en la nueva normalidad la comunicación tenga un plus de valor.

Para que todo funcione bien, hay que estrechar vínculos. Para conseguirlo, no solo debemos mostrar a la otra persona cuales son nuestras necesidades, también debemos conocer las suyas. Dichas necesidades en ocasiones pueden chocar con las nuestras, pero si aprendemos a ceder podremos ser mucho más fuertes. Los acuerdos en pareja son fundamentales para poder ser realmente felices.

A la hora de llegar a acuerdos, es importante negociar un poco, sin que esa negociación se pueda traducir en un enfrentamiento directo. Durante una relación, no solo se viven etapas divertidas y bonitas, también hay momentos complicados. Y en estos últimos es cuando realmente se demuestra que la pareja realmente está unida o está pendiente de un hilo. Si no quieres que el hilo se rompa con facilidad, deberás ser más flexible, al igual que tu pareja. Dos personas que no ceden ni un solo centímetro, están condenadas a fracasar en la relación. A través de muchos estudios se ha podido demostrar que las parejas que más duran son porque sus miembros han aprendido a retroceder para favorecer los intereses de la otra persona.

Ruptura de las parejas durante el confinamiento

Como venimos comentando a lo largo del artículo, el confinamiento ha ayudado a que muchas parejas se hiciesen más fuertes, pero no todo ha sido positivo. Un gran número de parejas también se han visto resentidas por la pandemia y eso provocó que un gran número se rompieran. No solo se rompieron las parejas que llevaban poco tiempo juntas, también algunas que llevaban muchos años o incluso décadas.

A la hora de hablar de rupturas, ha habido de todo. Desde las parejas que se dieron cuenta de que realmente no eran compatibles y era mejor dejarlo desde el punto más amable posible, hasta las parejas que han llegado a juicio porque se han roto desde el punto más negativo posible.

Lo que está claro es que cuando una relación no funciona, lo mejor es dejarlo. Hay que quitarse la idea de seguir y seguir para evitar estar solos. Como se suele decir, en ocasiones es mejor estar solos que mal acompañados. Es más, separarse de la pareja no es sinónimo de soledad para toda la vida. Siempre tienes opciones de volver a tu vida y conocer a una persona con la cual sea más compatible. Tenemos claro que las rupturas son complicadas y dolorosas, pero en ocasiones son necesarias para encontrar a la persona ideal.

Lo que está claro es que a pesar de que ha habido rupturas de todo tipo, la gran mayoría han sido cívicas. Según los expertos, eso se ha debido a que han tenido mucho tiempo para meditar y eso los ha llevado a la conclusión de que es mejor una ruptura amigable.

Lo que sí se puede decir es que la comunicación asertiva es la base del entendimiento de todas las parejas. No importa el tipo de relación que se esté viviendo o se haya vivido, una pareja que no se comunica, es una pareja que está abocada al fracaso. Por ese motivo, es importante trabajar la comunicación respetuosa para poder tener la certeza de que vamos a disfrutar de una relación sana. Incluso para realizar una ruptura, la comunicación es fundamental. Y recuerda, cuando una de las dos partes no está a gusto en la relación, es mejor acabarla. Es sufrir y alargar la agonía para nada.