¿Cuáles son las características de las personas con buenas relaciones sanas?
Sin lugar a dudas, para que una pareja pueda tener futuro es importante que la relación sea sana. Si no es sana, la misma está condenada al fracaso. Para ayudarte a comprender si la relación que estás viviendo con tu pareja es sana o no, vamos a mostrarte algunas características que demuestran que la misma realmente lo es.
1- Una relación sana no es perfecta
Es importante tener claro que no hay ninguna relación que sea perfecta. Siempre existen enfrentamientos entre las dos partes debido a que hay diferentes puntos de vista.
Una relación perfecta está condenada al fracaso. Me explico, cuando la relación siempre es perfecta, las dos partes se acostumbran a que no hay enfrentamientos entre ellos. Pero cuando existe el menor enfrentamiento a través de una pequeña discusión, entonces la relación corre un gran peligro. Por ese motivo, una relación sana siempre debe ir acompañada de pequeñas discusiones a través de las cuales las dos partes pueden ver los puntos de vista que tiene su pareja respecto a diferentes temas.
2- Resolución de conflictos
Sin lugar a dudas, no hay ni una sola pareja que no tenga discusiones. Incluso las parejas que sienten que son más que amigos, siempre tienen discusiones. No hay dos personas que piensen todo igual, siempre hay diferentes puntos de vista.
Esos diferentes puntos de vista hacen que se creen pequeños conflictos. Cuando se crean, hay que debatirlos de manera sana para intentar llegar a una resolución. Lo que nunca hay que hacer es intentar ocultar los conflictos porque antes o después terminarán por estallar y luego nadie podrá solucionar el problema. Es importante saber que una relación siempre va acompañada de conflictos y los mismos se deben solucionar en la medida de lo posible.
3- La relación sana no es magia
Se puede decir que la verdadera magia de las relaciones solo se vive a comienzos de la relación. Es cuando estamos en la nube, pero cuando pasa el tiempo la realidad vuelve a las vidas de la persona.
La magia no existe, sino que se busca para que parezca. Para conseguir que la relación funcione es importante que la comunicación sea la adecuada y sobre todo las dos personas sean sanas. Si una de las dos partes es tóxica, sin lugar a dudas la relación no tendrá demasiado futuro.
4- El espacio personal es importante
Algunas personas cometen el error de pensar que la pareja ideal es la que está todo el día junta y hace todo junto. La respuesta es no, una pareja sana es aquella que hace cosas juntas y otras por separado. Cada persona tiene que tener su espacio y la pareja lo debe respetar.
Cuando la relación funciona bien, la pareja no tiene problemas a la hora de dejar a la otra persona ir con los amigos, amigas, hacer sus propias actividades ligadas a sus intereses… Es decir, deja espacio sin que eso suponga ningún tipo de celos. Cuando los celos comienzan a hacer acto de presencia, eso quiere decir que la relación no es tan sana como parece. Recuerda, el espacio personal es importante para todas las partes afectadas. Sin ese espacio la relación corre más peligro de lo que pensamos.
5- La confianza es fundamental
Como hemos comentado en el apartado anterior, uno de los grandes enemigos de las relaciones sanas son los celos. Cuando los mismos comienzan a hacer acto de presencia, la relación comienza a sufrir.
Para evitarlo, es importante la comunicación y tener la certeza de que esa persona que va con tu pareja realmente no busca nada, sino que solo es una amistad. Y para certificar eso, es importante que tengas confianza en tu pareja. Si no la tienes, la relación no va por buen camino y eso hace que la probabilidad de fracaso sea más alta de lo esperado.
6- Igualdad
Para que la relación sea sana y duradera es importante que la misma siempre sea equilibrada. Para conseguir ese equilibrio es muy importante que la igualdad esté asegurada. Es verdad que no siempre es fácil conseguir un equilibrio entre las dos partes, pero el esfuerzo merece la pena a la hora de conseguir el éxito.
Cuando estás en pareja, no solo debes preocuparte por tus necesidades y tus gustos, también por los de la otra persona. Al igual que tú, tu pareja también tiene que ceder para conseguir un buen equilibrio. Una cosa está clara, si solo cede una de las dos partes, ese equilibrio no existe y la relación está en peligro.
7- Respecto
Otra de las características de las relaciones sanas es el respeto. Las dos partes se deben respetar mutuamente o el futuro será incierto. Es importante que cada una de las dos partes sea valorada por cómo es. Eso significa que ninguna de las dos partes tiene que intentar ser alguien que realmente no es para ser querida por la otra persona. Cuando se intenta hacer un papel, entonces es porque la relación no debería existir.
Una relación sana siempre está acompañada por respeto. Eso significa que ninguna de las dos partes debería intentar que la otra persona cambie. Es verdad que las personas cambian cuando están en pareja, pero el cambio debería ser natural, no obligado.